Ante la absoluta impunidad que asola todos los rincones del país y en el marco de un nuevo golpe a la democracia que le arrebata toda esperanza a los mexicanos conscientes de que la causa de los males es el estilo neoliberal y un régimen político caduco, se acordó impulsar la desobediencia civil entre las fuerzas perredistas señalo Javier Yau Dorry, integrante del Comité Ejecutivo Estatal del PRD.
Reveló que durante una reunión de trabajo en las instalaciones del Comité Ejecutivo Nacional PRD se analizó la profunda crisis que afecta a la izquierda chiapaneca, por lo que la comisión estatal planteó a los liderazgos nacionales el grave peligro que representa continuar con un grupo oficialista al frente del PRD en Chiapas y que responden a intereses ajenos a la institucionalidad partidista.
Los convocantes y presentes, en este acto, teniendo un cabal conocimiento de los innumerables abusos, ofensas y traiciones que el perredismo ha soportado en la entidad y que colocan el caso Chiapas en una situación de excepción para llevar a cabo una adecuada toma de decisiones que implique de una vez por todas recuperar la autonomía del instrumento de lucha partidista.
Yau Dorry recalcó que, en la relación de lo nacional con Chiapas no deben seguir prevaleciendo decisiones montadas en una racionalidad indulgente, ni mucho menos sostenidas en intereses faccionales mezquinos; porque no se vale no ver todas las pasadas experiencias desastrosas, ni la situación de excepción que vivimos con un partido secuestrado por la oligarquía local.
Por consiguiente, apuntó el perredista, a esta subcomisión convocante le corresponde asumir una decisión responsable y pertinente. Entendamos compañeros que las incorrectas decisiones nos llevaron al debacle electoral reciente y hoy se le adeuda a los chiapanecos el restituirle la autonomía al Partido, concluyo.
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