Silvano Bautista Ibarias.
A casi cuatro meses de haber asumido la responsabilidad como presidente municipal de Huixtla, Gustavo Cueto Villanueva, no ha tenido la capacidad para tomar acuerdos positivos con el cuerpo de edilicio, en el interior del ayuntamiento empiezan a darse golpes bajos, descalificaciones, fractura entre regidores y síndico.
Luego de señalar lo anterior pobladores del municipio costeños refirieron que todo aparenta como si en verdad los funcionarios municipales trabajaran en armonía, buscando el bien común, sin embargo, la realidad es otra toda vez que se logró saber que existe una serie de problemas al no lograr ponerse de acuerdo en algunas acciones que aparentemente son de beneficio para la población.
Aunado a esta situación, la población se inconforma con el arquitecto Fidel Ancheyta Cruz, director de obras públicas quien a menos de tres meses de iniciar actividades cambió su motocicleta por una flamante camioneta, mientras que hasta el momento nada se ha hecho por iniciar obras de relevancia.
Tales afirmaciones pueden comprobarse cuando se llevan a cabo programas o actividades donde deberían estar presentes las autoridades municipales, sólo asisten de dos a cuatro regidores y en representación del alcalde acude el síndico municipal Francisco Javier Ávila Solís.
Los ciudadanos, indicaron que hoy en día se han formado grupos de regidores quienes se reúnen en forma misteriosa para tomar acuerdos y confabular contra el edil a causa de la adjudicación de obras por el famoso diezmo, lo que deja mucho que decir de la capacidad de concertación y diálogo del alcalde a unos cuantos meses de trabajo.
Según los regidores a causa de la cerrazón del mismo Gustavo Cueto Villanueva, no se ha puesto en marcha el plan de austeridad de acuerdo al mensaje del gobernador Manuel Velasco Coello pues ha adquirido mobiliario nuevo para cada una de las áreas en el edificio de la presidencia, por lo que se preguntan ¿será que acaso estaban laborando en el suelo?
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