Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Ante el riesgo para la salud que implica el consumo de hongos silvestres, la Secretaría de Salud del estado emite una serie de recomendaciones a la población, considerando que Chiapas cuenta con una diversidad de especies de esta planta y que los casos de intoxicación incrementan al iniciar la temporada de lluvias.
Al respecto, la dependencia estatal precisa que así como hay hongos comestibles, también los hay venenosos, y es muy importante saber diferenciarlos. Los hongos que se pueden consumir sin riesgo alguno para la salud, generalmente presentan un color blanquecino en todo su sombrero, como las setas de los champiñones. En contraparte, deben ser sospechosos los hongos que cambian de color.
Otra característica de los hongos tóxicos es que tienen el anillo levantado, tienen verrugas blancas en el sombrero y al cortarlos o estrujarlos cambian de color o tienen un olor y sabor desagradables.
De acuerdo con el tiempo que transcurre entre la ingestión y la aparición de los primeros síntomas por el consumo de hongos tóxicos, los tipos de envenenamiento se pueden dividir en corta incubación, cuando transcurren menos de seis horas, y larga incubación, cuando transcurren más de seis horas, siendo ésta última categoría la más peligrosa, porque la intoxicación puede causar la muerte.
El consumo de hongos venenosos provoca vómito, diarrea, fiebre y taquicardia. Las recomendaciones generales para prevenir intoxicaciones son: no recolectar ejemplares viejos o en mal estado, ya que pueden tener larvas tóxicas; no utilizar bolsas de plástico para guardar las setas porque la falta de aire hace que se fermenten y se deterioren, pudiendo resultar tóxicos; no recoger hongos cerca de basureros y zonas contaminadas, entre otras.
Cabe mencionar que la Secretaría de Salud, a través de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios, implementa la vigilancia sanitaria permanente para impedir la comercialización de hongos en puestos ambulantes o establecimientos no regulados, ya que es más factible el daño a la salud si el producto se adquiere en lugares de dudosa procedencia.
Estas actividades se intensifican en la temporada de lluvias, principalmente en la región Altos Tsotsil-Tseltal de la entidad, donde la población, por usos y costumbres, aumenta el consumo de hongos silvestres.
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