Una marcada inconformidad existe en el distrito de Comitán ante las intenciones de su actual diputado federal Mario Francisco Guillén Guillén por llegar a la presidencia municipal, pues refieren que el abandono y olvido en que éste mantiene a sus electores no tiene precedente de ningún otro legislador y aun así pretende ser designado o impuesto por la vía del dedazo para esa candidatura porque sabe que en un proceso interno de su partido, difícilmente ganaría la postulación.
En la memoria de los comitecos aún está fresco el vergonzoso altercado que este legislador protagonizo con un periodista, a quien amenazo, que le valió una demanda ante la Procuraduría General de la Republica cuando le amenazo por el hecho de que el segundo exhibiera en las redes sociales gráficas de un accidente de tránsito en el que se vio involucrada una hija del legislador.
La autoridad ministerial atendió al periodista denunciante en la delegación de la PGR en Tuxtla Gutiérrez, cuyas declaraciones y hechos quedaron asentados en la averiguación previa AP/PGR/CHIS/TGZ-IV/366/2014.
Por estar dedicado de tiempo completo a buscar convertirse en alcalde de este municipio, Mario Francisco Guillén Guillén, diputado federal por el VIII distrito, mantiene abandonados a los demás municipios que conforman esa demarcación electoral a la cual sólo o escasamente llega a altas horas de la noche para apoyar o promover aspirantes del Partido Verde a las alcaldías más no para atender o escuchar las demandas de los habitantes de esos lugares.
Guillén Guillén, cuya originalidad comiteca está en tela de duda, desde el momento que tomara posesión de la titularidad de dicho encargo legislativo, redobló su agenda de “trabajo” político a lo largo y ancho de este municipio con la complicidad o respaldo de las autoridades estatales y municipales quienes le han proporcionado todos los apoyos habidos y por haber para efectuar esa labor que no es otra cosa que un abierto proselitismo en aras de la presidencia municipal.
Miles de voces, opacadas por las amenazas o coacción, gritan en silencio el exagerado despilfarro económico que Mario Francisco Guillén ha realizado y está realizando en materia de publicidad así como en el reparto de despensas, diversos insumos agrícolas y otros materiales o apoyos los cuales prácticamente los condiciona a cambio de votos o respaldo hacia lo que busca; la alcaldía comiteca.
Su personalidad real es otra. Más que una candidatura natural, independientemente de que sea una persona proveniente de los bajos mundos de la escases y de otras cuestiones ligadas a su quehacer antiguo de chofer o concesionario transportista en la cual se le vio envuelto en situaciones riesgosas y comprometedoras o conoció a personas que hoy están detenidas, Mario Francisco Guillén será la más aberrante imposición para Comitán y para los comitecos.
Nunca antes en la historia de Comitán se había visto una imposición tan descabellada así como la utilización de recursos públicos para tal fin. La misma presidencia municipal que aún encabeza el empresario Luís Ignacio Avendaño Bermúdez está a disposición de Mario Francisco Guillén al grado tal de que los policías municipales le cargan su silla de montar y le rinden pleitesía a cado ratos. Pareciera también que el mismo alcalde Avendaño Bermúdez, a pesar de que Guillén Guillén se ha expresado mal de él, está bajo las órdenes de este diputado de marras.
No obstante los sendos expedientes o asuntos familiares, así como el uso de las despensas, fertilizantes y otros proyectos para realizar proselitismos.
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