Se firmó una acta de entrega-recepción, en donde el secretario general de Gobierno Eduardo Ramírez Aguilar firmó como testigo de honor.
El tema Puebla, Chenalhó es un tema presente en la agenda de gobernabilidad, el cual no se ha desatendido en ningún momento: ERA
Silvano Bautista Ibarias.
Con la finalidad de abonar a la reconstrucción del tejido social en el ejido Puebla, del municipio de Chenalhó, se llevó a cabo la firma del acta de entrega-recepción del predio que ocupaba la iglesia Apostol San Pedro, por parte del presidente del Comisariado Ejidal, Agustín Cruz Gómez a la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, representada por el Monseñor Enrique Díaz Díaz.
En la comunidad Puebla, del municipio de Chenalhó, el secretario general de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar y el subsecretario de Asuntos Religiosos, Víctor Hugo Sánchez Zebadúa, firmaron como testigos de honor de este acto, que a decir de los representantes religiosos y las autoridades, es un gran paso para la construcción de la armonía y la paz en el ejido, el cual no se hubiera podido lograr sin la voluntad de las partes.
Ante autoridades ejidales y representantes de la iglesia Católica y la iglesia Nacional Presbiteriana, el secretario de Gobierno reconoció que este tema no ha sido fácil pero se está avanzando significativamente, toda vez que es un tema presente en la agenda de gobernabilidad el cual no se ha desatendido en ningún momento.
En este sentido invitó a los evangélicos y al comisariado ejidal a respetar el dictamen de la Secretaría de Gobernación que tiene todas las garantías para que la iglesia Católica haga uso de este predio y puedan construir su templo, pues al final –dijo- todos evangélicos y católicos estamos para hacer el bien común para que su comunidad viva en paz con la tranquilidad de sus familias.
Ramirez Aguilar manifestó que desde el Gobierno de Estado se seguirá trabajando en el tema de Puebla para darle solución a los asuntos pendientes.
En representación de los católicos, el obispo Enrique Díaz Díaz pidió el respeto mutuo para poder construir una nueva comunidad en armonía de unos con otros.
Por parte de la Iglesia Nacional Presbiteriana de México, el pastor Jacobo Hernández Hernández reconoció la voluntad de la asamblea ejidal, la cual se está materializando con este evento.
El predio que hoy fue entregado motivó una disputa entre católicos y evangélicos, en donde resultaron afectadas varias familias que decidieron albergarse en otras comunidades del mismo municipio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario