Pide la CCC atención al problema de la caida del precio del maíz y el frijo.

Silvano Bautista Ibarias.

Max Correa Hernández, Secretario General de la Central Campesina Cardenista, pidió atender la problemática de la caída de los precios en el frijol así como en el café ya que pequeños y medianos productores están en crisis por los costos de producción, la presencia de intermediarios y la existencia de enfermedades como la roya.

Como parte de la problemática planteada a la Secretaría de Agricultura Ganaderia Pesca y Alimentación, solicitó rescatar el padrón cafetalero, atender la problemática de la roya, crear el Instituto Mexicano del Café con la modalidad de acopio y comercialización así como crear el Banco de Agricultura.

En tanto, respecto al frijol, el líder campesino indicó que el programa de acopio establecido por Sagarpa no ha funcionado debido a que los acaparadores han hecho de ello un negocio, por lo que pidió por tanto, iniciar el acopio de 100 mil toneladas de frijol como reserva estratégica para el apoyo de municipios extrema pobreza.

Por otra parte, Correa Hernández, en su mensaje político, aseguró que la Central Campesina Cardenista está lista para participar en la ruta que el Presidente Enrique Peña Nieto y el titular de Sagarpa, Enrique Martínez y Martínez establezcan en la Gran Reforma para el Campo.

Dijo que la CCC acepta el reto de los nuevos diseños institucionales pero siempre y cuando éstos impulsen la agricultura campesina como lo propone la misma FAO para el 2014 a fin de superar la desigualdad y la pobreza.

Y es que dijo que ante la problemática que enfrenta la producción de café y frijol es necesario que tanto SAGARPA junto con la Secretaría de Economía emitan un tablero de Control de precios de siete productos básicos e importantes para el país a fin de evitar estas distorsiones cómo será el caso del maíz, frijol, sorgo, trigo, pollo, azúcar y huevo.
Ello, además de garantizar que no se permitirá la especulación con el precio del café y de frijol, pues es inadmisible que tengamos un “campo bipolar”, ya que mientras el precio de maíz cae en el mercado el kilogramo de tortillas se mantiene alto.